
Esta es mi charla de TEDx Almendra Medieval. Me hizo mucha ilusión prepararla y ahora, aún más, compartirla. Buen viaje:
Bienvenidos a este mundo que cambió. Todos los que estamos hoy acá somos protagonistas y espectadores del cambio, y ninguno es indiferente a él. Todos sabemos que el mundo ha cambiado. Las nuevas tecnologías y especialmente Internet lo han cambiado todo.
Y entre los muchos cambios, la tecnología ha cambiado el concepto de tiempo y de espacio.
¿Cómo ha cambiado el concepto de espacio? Internet ha hecho desaparecer las distancias. Hoy estamos cerca de lo lejos. Hoy estamos acá en Vitoria y hay gente en otras latitudes que nos está viendo y compartiendo, en tiempo real. Lo que conocíamos como distancia ha cambiado de significado. Aunque alguien no está acá hoy puede estar acá. Todo está conectado. Internet volvió a pegar el mundo como un nuevo Pangea, aquel súper continente que unía toda la Tierra.
¿Cómo ha cambiado El tiempo? Hoy el tiempo tiene un nombre: lo instantáneo. La información, los datos, el conocimiento, los avances, las catástrofes, todo sucede y nos llega al instante. En gran parte del siglo XX la falta de información hizo que atrocidades y desgracias no tuvieran la voz del hombre y que el hombre no sabía lo que pasaba. Una de las grandes contribuciones de lo nuevo en este nuevo siglo es que sabemos lo que sucede. Y saber no te deja indiferente. Ha cambiado el acceso ala información y por lo tanto ha cambiado nuestra responsabilidad porque ahora cada uno de nosotros es una voz. Hoy si no queremos enterarnos de algo es prácticamente imposible. De lo que no nos enteramos es porque alguien, muy poderoso, lo tapa, pero solo momentáneamente. Hoy no hay excusas para no implicarse. Ya no se puede decir “no lo sabía”, lo digital ha borrado esta excusa por completo.
En este siglo XXI estamos a un click de estar informados, de aprender idiomas, de comprar algo, estamos a un click de compartir, estamos a un click de todo.
Esto no es una era de cambio, es un cambio de era.
Ya hemos asumido que el cambió tecnológico ya ocurrió. Ahora nos toca asumir el cambio humano. Los cambios son como tsunamis. Pero una vez que estamos en ellos nos permite abrir puertas. Derribar muros. Construir puentes. Unir personas.
Es cierto que el cambio nace de descubrir algo nuevo y eso nuevo es como una avalancha que lo arrastra todo. Se lleva por delante todo lo que está a su paso especialmente todas las estructuras viejas.
El gran cambio que nos convoca es que ahora toca volver a poner en el centro a lo humano. Ya han estado en nuestro centro los dioses, la ciencia, la tecnología, el Smartphone, ahora es el momento de volver a reconocer lo humano en el centro.
La ciencia ha demostrado que el hombre ya se reunía socialmente alrededor del fuego hace un millón de años. Un millón de años. El fuego introdujo cambios relevantes en el camino de la evolución humana. Como también lo hicieron después la agricultura, la rueda, la imprenta, el motor, la electricidad, o Internet hoy. Todos somos los hijos del fuego y los padres de Internet. De hecho Internet es nuestro nuevo fuego. Pero tenemos que aprender a gestionarlo, a usarlo, a que sea útil. Esta en nuestras manos hacer que el fuego ilumine y de calor y no que nos queme. Y estamos a tiempo de ser inteligentes, sensibles y sobretodo creativos para saber que hacer con este nuevo fuego.
La ciencia siempre lleva la delantera en el descubrimiento y en la generación del cambio. La ciencia es la precursora. Inevitablemente los demás aspectos de nuestro mundo cambian. Cuando como ahora, cambian los conceptos de espacio y de tiempo, el verdadero cambio que nos pide esta nueva era de la evolución humana, es el cambio humano.
Al entusiasmo y la fascinación que me generan ver la exploración del espacio o de las profundidades marinas, las avances en medicina y biología, los saltos en la ciencia y en la física, y en tantos otros ámbitos de nuestra vida se le suma una necesidad en relación a cómo construir nuestro futuro compartido.
Mi foco y el de muchos es evitar que nos roboticemos, que despertemos de la anestesia y que recuperemos y reconozcamos lo humano en el off y en el online.
El hombre tiene la responsabilidad de evolucionar para igualarse a su progreso tecnológico. Porque sino nos igualamos seremos parte de un desequilibrio en el futuro inmediato.
Y el gran mensaje, la gran llamada es que Todos somos parte de este cambio. Todos formamos parte de esta tarea. El cambio se genera desde todos los ámbitos: laborales, artísticos, culturales, educativos… Todos y cada uno somos parte de la construcción de este cambio.
En vez de asustarnos, lo que necesitamos es organizarnos. ¿Qué necesitamos para generar este cambio? ¿Con que herramientas contamos?
No existen las distancias.
Todos estamos conectados.
No existe el tiempo.
Todos tenemos una voz.
El mundo es enorme y diverso. La diversidad es un valor. Cosa que no pasaba en el siglo XX, donde lo diverso nos llevo a conflictos, enfrentamientos, guerras carentes de toda humanidad. En el siglo XXI la diversidad es un valor, no un obstáculo. Nuestras diferencias nos enriquecen y cada una puede contribuir de alguna manera. Todo puede conectarse, todo puede unirse. La tendencia unificadora es clave en este siglo. Todo lo que se dividía hoy tiende a juntarse: TODOS SOMOS PARTE DE ESTE CAMBIO GLOBAL.
El mundo que no hagas tú con tu esfuerzo , en el que no te impliques lo construirán otros. Nadie te esta esperando a ti, sino que eres tú quien debe involucrarse y hacer que su presencia cuente. Si uno desea cambiar algo debe comprometerse. Estes donde estés puedes involucrarte. Estes donde estés podes aportar. No hay tamaño. Todos los que no tenían voz, hoy la tienen.
Este cambio humano necesita avanzar y rápido. Para ello hay que involucrarse, comprometerse. Despertar de nuestro letargo digital, de nuestra somnoliencia y de nuestra anestesia y desplegar las alas de la sensibilidad y de la energía creativa.
Todos los aspectos de la comunicación han cambiado. Hoy puedo oir tu voz, conocer tus ideas, entender tus necesidades. El cambio humano se genera a partir de conocer y entender las necesidades. Las necesidades son en definitiva la madre de la innovación. Ha llegado el tiempo que implicarse, de ponerle voz a la necesidad, de comunicarlo. Tu presencia aquí hoy tiene que ver con tu responsabilidad de implicarte, de ser parte del cambio. Cuando todos seamos parte del cambio, viviremos en un mundo para todos.
Entonces surge una nueva pregunta ¿Cómo vamos a generar ese cambio?
Nos han enseñado desde pequeños a seguir reglas, moldes, estructuras. Nos han enseñado a ver lo mismo, de la misma manera y no han potenciado nuestras capacidad creativa, sino lo contrario. Nos han preparado justo de la manera contraria que nos demanda este nuevo tiempo, que nos pide a gritos CREATIVIDAD.
Para crear algo nuevo necesitamos utilizar un proceso creativo a partir de nuestra inteligencia colectiva. Para conocer algo, lo primero es sumergirse en un proceso intrínseco al ser humano que consiste en:
Dividir para conocer. Y en comprender para volver a unir.
Comenzando primero a ver todo en su estado actual y empezar a demenuzar poco a poco todos sus componentes. Necesitas ver de qué está hecho:
Sus valores, su gente, su historia, su filosofía, sus problemas, sus fortalezas, su economía, su repercusión, sus tradiciones, sus bloqueos, su cultura, etc. En este proceso tienes que despedazarlo todo para poder comprender su mecanismo a fondo y junto con él, lograr descubrir la razón de sus fracasos y en donde pueden estar las soluciones que puedan hacerla crecer mejor.
El conocer las partes y comprenderlo es lo que te ayuda a solucionarlo y evolucionarlo.
Luego llega el momento de volver a unirlo todo pero esta vez, de un modo distinto. En ese proceso de comprensión de cada una de sus partes, habrás podido descubrir no sólo los fallos y las piezas que deberas descartar, sino también aquellos potenciales ocultos que nadie veía pero que ahi estaban, ahí estaban y que pueden dar un valor enorme a aquello.
Por lo cual en este proceso de unir se logra formar algo nuevo. Y esto es lo que significa ser creativo. La creatividad exige principalmente la capacidad de observación con una mirada distinta porque el fin de todo acto creativo es la unión.
Y esto es más o menos lo que hago en mi trabajo, cada día. A otra escala, en empresas, organizaciones, ciudades. Las soluciones siempre las encontramos dentro del problema. Por ello poder ver con otra mirada te permite identificar la solución dentro del problema. Hacer fácil lo difícil.
Cuando estas dos fuerzas opuestas, dividir y unir son realizadas a conciencia, siempre generan algo nuevo. Es por eso que el proceso creativo se ha vuelto un método valioso para potenciar a que los seres humanos logren primero comprender el funcionamiento de las cosas a través del conocimiento para luego volver a mezclar y a unir todo de una forma mas creativa. Y dentro de la creatividad hay un componente esencial que es la confianza.
Todos los que crean que cambiar el mundo, a mejor, no es imposible, ESTAN CONVOCADOS A HACERLO. Y los que no, son por supuesto libres para seguir en lo suyo. Los que se sumen, bienvenidos, más allá de su origen, su sexo, su edad, su todo, lo que vale es tu compromiso, tu creatividad, tu voz. Ya no estamos lejos, ya no estamos solos, y ya no somos mudos.
Cuando una generación no logra superar a la generación que le antecede, la evolución no se detiene, retrocede.
Todos somos parte en la construcción de este mundo global, que necesita ser para todos e incluir a cada uno. Y para que en ese todo, se incluya a todas las partes, ya sea en un nuevo modelo de marca o en una nueva versión del mundo, hace falta que nos refleje a todos.
Cada uno desde su trabajo y desde su lugar, debe contribuir a construir este siglo del “Y” que logre sustituir al siglo del “0” del que venimos. Con un “Shake it! Mix it!” hecho con mucha energía y mucha más valentía para lograr desde lo humano la evolución que la tecnología nos ha impulsado a hacer.
Hemos conseguido unir lo invisible con los visible, el online con el offline, lo intangible con lo tangible, el silencio con los sonidos, la razón con la emoción, el conocimiento con el vacío, ahora se ha vuelto imprescindible que aprendamos a vivir entre dos mundos: el offline y el online. Y no dejes jamás que ninguno de tus mundos te absorba por completo; combínalos, conjúgalos, sacúdelos, mézclalos, enriquécelos, pero no dejes que ninguno se apodere de ti, porque tu perteneces a ambos.
MUCHAS GRACIAS.
Andy, recibe un fuerte abrazo que dure 8 segundos :D.
Amigo muchas gracias por tus maravillosas enseñanzas , hoy en día llevo un proyecto del cual quiero reconstruir, reinventarlo. Quiero ayudar de alguna manera a fortalecer el cambio que estamos viviendo.
A partir de la entrevista con Alicia Senovilla en
Marketin.TV cambio algo en mi, ahora tengo una perspectiva distinta que ahora no me deja dormir. Pronto adquiriré también tu gran libro BrandOffOn.
Saludos cordiales
Milianny Cova